29 octubre 2009

Asociaciones digitales

Hace unos años, en el 2006 concretamente, la Junta de Andalucía hizo un estudio sobre la sociedad de la información en Andalucia y llegó a la conclusión que aunque más de la media de las asociaciones tenian en presencia en internet, muchas otras asociaciones aún no, Para superar esta BRECHA DIGITAL creó una serie de proyectos para"Asociaciones Digitales" con el propósito de incentivarlas para que sus gestiones, comunicaciones y actividades se realizaran de una manera más eficaz a través de internet y las nuevas tecnologías.

El pasado martes asistí como técnico de una de ellas a una jornada de presentación de los cursos de formación, ya nos habían avisado que la formación que se harían exclusivamente ONLINE para poder usar mejor este tipo de tecnología (?); la sala estaba llena con unas 250 personas o más, y cuando llegó el turno de preguntas una representante de una asociación habló preocupada porque se estaba enterando en esos momentos que el curso era obligatorio, si querian seguir contando con la subvención que ya se habian gastado, pero a su vez, se quejeba de que muchas de ellas no habian cogido un ordenador en su vida y vivian en un pueblo; de las 8 mujeres que formaban la junta alguna tenía más de 70 años, y para complicar su caso, aún no tenian el equipo informático que la persona que le "arregló los papeles" le había prometido.
El formador que estaba allí le contestó que existia un centro guadalinfo en su localidad y que el teléfono 900 que ponia el programa a disposición le ayudarian en todo momento.

Y ellas respondieron que el único sitio en internet que podian disponer era de una hora al día y que el centro guadalinfo siempre estaba ocupado.

Y me pregunto ¿Como quieren reducir la brecha digital si usan medios digitales para reducirla, cuando aún no saben usar estos medios?

Paradójico.

Me acompañaba Maricarmen, administrativa de la CAONGD y al ver que no se le daba solución, nos acercamos, yo en calidad de Voluntario de ACD, para interesarnos por su problema, ya que el formador solo se limitaba decirles que tenían ayuda online o al teléfono 900; no les daba otra solución. Maricarmen le tomó nota de su teléfono y yo le dí otro del voluntariado a ver si alguno de nosotros estabamos cerca de su localidad para echarles una mano.

Algunas veces, pienso que algunas acciones formativas se olvidan de lo más básico. Es como decir que tienen que aprender a leer y a escribir, pero nadie les enseña como coger un lápiz o abrir un libro. Ni siquiera la dirección donde ir a comprarlos.