Esta forma de comunicación también la podemos experimentar con nosotros mismos cómo nos decimos las cosas, sin juzgarnos ni autocastigarnos, siendo conscientes de nuestros sentimientos producidos por nuestros deseos.
Algunas veces es difícil comunicarse con otras personas porque sus peticiones no son claras, no solo porque se formulan vagamente o juzgando a su interlocutor, sino que además están desconectados con sus sentimientos o desconocen que éstos están producidos por sus necesidades que ni siquiera son capaces de reconocer o dar nombre.
Se creía que cuando comunicamos antes pensamos y luego hablamos con nuestras palabras, pero no es así, sino que primero hablamos automáticamente y estas palabras modulan nuestros pensamientos.
El núcleo de la comunicación no violenta es cambiar la hostilidad del corazón de las personas cambiando el lenguaje de modo que haya buena voluntad entre las personas.
Se trata de comprender los motivos que provocan la alineación entre las personas y saber los factores que la causan, el principal factor es juicio moral. Significa que cuando vemos a alguien hacer algo tratamos de encontrar un razonamiento moral por lo que lo hace: una persona es de esta u otra forma, hacemos una suposición y buscará pruebas de que tiene razón, repitiéndo el circulo, juicio, buscar evidencias reforzar el juicio, volver al principio.
Lo que hay que pensar es que las personas son normales y corrientes, no son malas, lo que ocurre es que a veces cometen errores.
Resumen, todo el proceso de comunicación no violenta consta de cuatro pasos.
- Observación
- Sentimiento
- Necesidad
- Peticón
Siempre que se tenga en cuenta estos cuatro elementos se puede mejorar la comunicación. Se empieza sin emitir juicios, sino observar, creer que la persona es buena por sí misma.
Consejos para mejorar las relaciones entre las personas.
- No compararse con los demás. Si dos personas empiezan juntas pero una progresa y la otra no hace que la comparación corte la bondad de los corazones hacia la otra persona y te hará miserable.
- No eludir la responsabilidad con el pretexto de tener que hacerlo. "Tuve que hacer esto porque me lo ordenaron" hay que cambiar. "yo elijo" muestra responsabilidad. si nos acostumbramos a decir "TENGO QUE" la eludimos.
- Tenemos que identificar muestras emociones, comprenderlas. ¿Cómo podemos comunicarnos? Las emociones se esconde una necesidad racional. Aunque no seamos consciente. Las emociones pueden ser las primarias y se despiertan sin pensarlas y no puedes controlarlas pero las derivadas sí, tienes la oportunidad de elegirlas.